Educar a niños y jóvenes desde Kínder hasta Duodécimo grado para que desarrollen al máximo sus capacidades intelectuales, sociales, físicas y sus destrezas académicas según el nivel, dentro de un programa académico regular que se adapte a las necesidades de cada educando. Para lograrlo tomamos como punto de partida los siguientes aspectos:
–Cada estudiante es diferente en intereses y habilidades
-Cada estudiante aprende de manera diferente
-El conocimiento está sujeto a cambios continuos por lo que las clases deben ser dinámicas y funcionales en conceptos hábitos, destrezas y valores para aprender.
-El estudiante aprende y se desarrolla mejor bajo condiciones de amor, confianza y refuerzos positivos.